“María y Marta, su hermana” (Juan 11:1).
Lectura: Juan 11:28-35.
María y Marta eran hermanas y las dos eran amigas de Jesús, pero cada una de ellas sostenía una relación diferente con Jesús. Cada uno de nosotros podemos tener la relación con Él que deseamos. Al ir leyendo esto piensas: ¿Cómo es la relación con Él que quiero yo?
- Marta no se sentaba a los pies de Jesús, María sí.
- Marta no escuchó a Jesús, María, sí.
- Marta no lloraba sobre Jesús; María, sí.
- Marta no ungió a Jesús; María, sí.
- Marta no adoró a Jesús; María sí.
- María no iba corriendo, haciendo cosas; Marta, sí.
- María no se quejó de su hermana; Marta, sí.
- María no le acusó de nada al Señor; Marta, sí.
- María no le dijo a Jesús qué hacer, o qué no hacer; Marta, sí.
- María no tuvo ninguna duda; Marta, sí.
- Jesús no defendió a Marta; a María, sí.
- Jesús no llamó a por Marta; a por María, sí.
- Jesús no pidió que Marta lo llevase a la tumba; a María, sí.
- Jesús no lloró con Marta; con María, sí.
- Jesús no alabó a Marta; a María, sí.
- Marta le dio al Señor su trabajo.
- María le dio su tesoro, su corazón, su devoción y su adoración.
Las dos eran creyentes, mujeres de fe y amaban al Señor.
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