Mateo 28: 1-6

Al final de los sábados,° al amanecer del día uno° de la semana, llegó Miriam de Magdala, con la otra Miriam, para ver el sepulcro.

2 Y hubo un gran terremoto, porque un ángel del Señor, descendiendo del cielo, se acercó e hizo rodar la piedra, y se sentó encima de ella.

3 Su aspecto era como un relámpago, y su vestidura blanca como la nieve.

4 Y por temor a él,° los que custodiaban° temblaron y quedaron como muertos.

5 Y el ángel tomó la palabra y dijo° a las mujeres: Vosotras no temáis, porque sé que estáis buscando a Jesús, el que fue crucificado.

6 No está aquí, porque resucitó como lo había dicho. Venid y ved el lugar donde yacía.

Santa Biblia: La Biblia Textual, Segunda Edición. 1999 (Mateo 28: 1-6). Sociedad Bíblica Iberoamericana, Inc.